Little Dribble

Little Dribble es un ‘endless runner’ en el que no pararemos de avanzar mientras saltamos y pateamos la pelota de fútbol. Eso sí, sin olvidarnos del vecino que tenemos detrás intentando atraparnos.

El sistema de juego de Little Dribble es completo pero sencillo. Nos será muy fácil acostumbrarnos a él. Deberemos de tener en cuenta que, en cuanto empecemos la partida el protagonista (y el vecino pesado) comenzarán a avanzar. Y, el niño de la pelota depende de nosotros para no ser atrapado. Por tanto, la clave para evitarlo será controlar correctamente la pelota pateándola cada vez que sea necesario (evitando, como es lógico, que esta toque el suelo). Aunque, no todo se quedará ahí ya que, a medida que vayamos avanzando, aparecerán numerosos obstáculos (que deberemos de saltar) en la misma acera por la que tendremos que pasar. Por ende, si tropezamos con ellos, caminaremos más lento y, el vecino quedará cada vez más cerca de nosotros.

Por lo tanto, para esforzarnos y demostrar nuestras dotes con el balón de fútbol solamente tendremos que deslizar el dedo sobre la pantalla. Si hacemos swipe (siempre de abajo a arriba) en la zona de la izquierda de la pantalla, el niño pateará con la pierna izquierda. Lo mismo pasará si lo hacemos con la derecha. Y, además, si queremos saltar (para golpear aún más fuerte la pelota o esquivar obstáculos), dejaremos pulsado un dedo sobre la pantalla mientras con otro pateamos el balón haciendo swipe. Controles simples pero suficientes como para comprobar rápidamente nuestros reflejos.

Little Dribble es un divertido ‘endless runner’ lleno de sorpresas. Mientras escapamos del vecino que nos persigue, aparecerán todo tipo de elementos por nuestro paso. Y, aún mejor será cuando contemos con los puntos suficientes como para vestir a nuestro protagonista con camisetas de nuestros equipos de fútbol favoritos.